Como sabéis, Jugosos, aquí Marlora anda probando un poquito de todo desde su Renacer.Además, de dormir, limpiar, cocinar, hacer deporte, empujar un negocio, quedar con los amigos y organizar un bodorrio, me estoy dedicando a explorar cosas que antes me llamaban la atención, pero nunca me decidía a hacerlas.
Es el caso de aprender a hablar en público. Me pongo nerviosa, me sudan las manos, me tiembla la voz... Decidí juntarme a los Toastmasters, en su recién estrenada sección de Coimbra.
Toastmasters ("expertos en brindis") es una asociación sin fines lucrativos, dedicada a la mejora de competencias de comunicación, discurso en público y liderazgo de sus miembros. La organización, através de reuniones quincenales, ayuda a los interesados a encontrar el arte de la palabra y todas las competencias asociadas (pensar, escuchar, motivar, etc.) para potencial el aprendizaje continuo y el desarrollo integral de la persona.
Aparecí una tarde, sin conocer a nadie, en una de las sesiones, y simplemente escuchando y viendo lo que allí pasaba, quise participar. Existen manuales de comunicación que los discursantes deben leer y practicar en diversos niveles (aprendiz, avanzado o experto). Los miembros se proponen discursar dentro de unos tiempos establecidos, y los demás evalúan o ejercen diversos roles en la sesión (contador de tiempo, vigilante de muletillas y gramática, evaluador general, etc.). Son sesiones muy ágiles, extremadamente bien preparadas en la que la puntualidad y el respeto son las estrellas.
Por el momento sólo he salido al estrado en los "Table Topics", discursos cortos e improvisados dedicados a los novatos, y ejercí de evaluadora de un orador que es una joven promesa. La evaluación de mis apariciones? coloco las manos detrás del cuerpo, me tiemblan las manos, uso muletillas "ah" sin parar y tomo el escenario como si fuera mío (cuando debía tan sólo evaluar y no discursar). Así se aprende!
En la próxima sesión realizaré mi discurso de primeriza, que ya he titulado "De Espanha bom vento e bom casamento", en el que se supone que hablo del tema que mejor conozco: mi vida.
Los Toastmasters ofrecen algo más que unas sesiones sobre cómo hablar en público. Nos colocan en situaciones a veces inesperadas, tenemos que oir críticas constructivas, escuchar historias de lo más variado, y, al ver a los más evolucionados comportarse como líderes, una se siente inspirarada, dan ganas de imitarlos y ... brillar por un mundo mejor!
Un brindis a los Toastmasters!
